El Ayuntamiento de Zaragoza ha seleccionado al Hospital San Juan de Dios para un proyecto pionero en valorización de residuos. Concretamente en la generación de biogás mediante el aprovechamiento del residuo orgánico procedente de las cocinas y cafetería del propio Hospital.
Más tarde volveremos sobre esto.
En 1771, Francisco de Goya recibió el encargo de decorar al fresco la bóveda del coreto en la Basílica del Pilar en Zaragoza. El pintor aragonés demostró con ella conocer y dominar la técnica de la pintura al fresco si bien, sus honorarios fueron mucho menores que los de otros artistas. Así, Goya recibió 15.000 reales frente a los 25.000 (más los gastos) que se embolsó el madrileño Antonio Gonzalez.
Pareciera que para los contratantes de aquella época, todo lo proveniente de “la capital” o foráneo, debiera de resultar indudablemente mucho mejor.
Pobre Don Francisco y muy triste final para sus días en un forzado exilio
Estos días podemos disfrutar en el San Juan de Dios, de la exposición itinerante ¿Goya en un Hospital?
Pareciera que la historia ya ha puesto a Don Francisco en el sitio que le corresponde.
Círculo virtuoso
Economía circular lo llaman ahora
Probablemente, aquellos contratantes de Don Francisco resultaban desconocedores que 1.500 años antes de que Felipe II siquiera pensara en otorgar a Madrid el rango de capitalidad, cuando aquello no era más que un triste y desolado páramo, Zaragoza ya disfrutaba de una moderna civilización acompañada de una amplia oferta cultural y vida social, arquitectura, ingeniería e infraestructuras. Esto incluye desde la existencia de calles y calzadas, alcantarillado, Puerto Fluvial, Termas, SPA, Teatro y otros muchos servicios que ciudades o países, apenas conocerían y disfrutarían siglos más tarde
Lo anterior no significa que todo lo foráneo necesariamente deba resultar mejor, peor o siquiera comparable.
Ni mucho menos
¿Resultan comparables la Zaragoza de Cesar Augusto de hace más de dos milenios, con el Madrid de Felipe II 1.500 años más tarde?
Simplemente y como al inicio escribía Proust , contemplar lo propio con unos nuevos ojos
Usar nuestro propio círculo virtuoso, un aprovechamiento de lo propio y sí, sin duda enriquecer adicionando este círculo con cualquier otra aportación o mejora.
Círculo virtuoso que no vicioso, negando el pan, la sal o las bondades de lo propio ante lo externo.
Hace unos años e invitados por el Ayuntamiento de Zaragoza, tuvimos la oportunidad de realizar un estudio técnico sobre el proceso energético en su planta de valorización de residuos.
De las 4 plantas líderes europeas o de referencia en aquel momento: Marsella, Lisboa, Madrid y nuestra planta de Zaragoza, los números de esta última superaban ampliamente al resto en eficiencia energética, aprovechamiento y valorización de estos residuos.
Para una entrada bruta de residuos de unos 800 Tm/día, trasladaban a mezclador unas 250-300 Tm/día. Desde aquí, 4 Digestores de 3.600 m3/h vehiculaban diariamente a gasómetro unos 28.000 m3/h de biogás y, tras su posterior paso a cogeneración, una producción de energía eléctrica renovable de unos 60 Mwh/día.
Todo un éxito y unos espectaculares números.
Ya en aquel tiempo, nuestros técnicos municipales abogaban por la necesidad de una separación en origen de los residuos de materia orgánica. Fuese esto para un mejor procesado de esta materia orgánica con su introducción directa a digestores, fuese esto para un óptimo aprovechamiento del residuo final en forma de compost orgánico.
Sin una adecuada separación en origen del residuo orgánico, este compost resulta inhabilitado para posteriores usos agrícolas o alimentarios.
Parece que esta actual mayor sensibilidad o conciencia medioambiental de la sociedad, harían posible a corto plazo aquel antiguo deseo de nuestros técnicos municipales, y ya se plantea la recogida generalizada y selectiva de esta materia orgánica de forma separada.
Para todos y cada uno de los hogares
El tiempo, una vez más encajando las piezas
Las cocinas y cafetería del Hospital San Juan de Dios generan aproximadamente unos 80 Kgs/día de materia orgánica.
Escasa cantidad para un tránsito de aproximadamente unas 1.000 personas/día por el Hospital y cuatro servicios diarios de manutención para pacientes y usuarios.
Desayunos, comida, merienda y cena 365 días al año.
Invitados a participar tras solicitud nuestra para esta experiencia piloto promovida por el Ayuntamiento de Zaragoza, estas aprox. 30 Tm/año de residuo orgánico procesadas y separadas en origen, pasarían directamente a valorización y producción de biogás.
Esto supone al menos una producción de unos 3.000 m3/h anuales de biogás
Prácticamente, el consumo energético en Gas Natural de estas cocinas y cafeterías. Esta generación de biogás casi permitiría compensar sus emisiones
Y todo esto, quien lo diría, mediante el simple aprovechamiento y valorización de unos residuos.
Quizás donde otros ojos verían simple basura o desperdicio, nuevos ojos vislumbran aprovechamiento energético, gestión eficiente de los recursos naturales, sensibilidad medioambiental y responsabilidad social.
Economía circular
Círculo virtuoso
De nuevo con el maestro Proust y en busca de ese tiempo perdido.
Nada se pierde…
Cuando nada mas subsiste del pasado, después de que la gente haya muerto y las cosas se hayan roto y desparramado, el perfume y el sabor de las cosas permanecen en equilibrio mucho tiempo como almas, resistiendo tozudamente en pequeñas e impalpables gotas de su esencia dentro del inmenso edificio de la memoria.
Sobre el autor