«La economía, estúpido» Campaña Presidencial de Bill Clinton en 1992

PorRaul

«La economía, estúpido» Campaña Presidencial de Bill Clinton en 1992

🌟 «La economía, estúpido»

Esta célebre frase de la campaña de Bill Clinton en 1992 nos recuerda la importancia de la economía en nuestras decisiones. Hoy, todo parece reducirse a acrónimos.

Preferiblemente en inglés para que se entiendan menos.

También como no, se utilizan ampliamente en eficiencia energética: COP, SCOP, EER, SEER, kWh… Seguramente has intentado alguna vez descifrar tu factura eléctrica y te has sentido como tratando de leer jeroglíficos modernos.

🔍 La Jerga que Confunde

Utilizando estos acrónimos y términos técnicos, algunos técnicos pretenden impresionar al cliente, haciéndole creer que está obteniendo lo último en tecnología. A menudo, esta asimetría en el conocimiento solo sirve para enmascarar la falta de eficacia real del producto ofrecido.

Utilizando estos acrónimos y abundante jerga técnica, preferentemente poniendo voz engolada, algunos técnicos pretenden hacer creer al cliente que está jugando en primera división, cuando realmente esto no es así y probablemente ni el propio técnico conoce otra cosa, que el tratar de colarle su producto abusando de esta asimétrica y poco ética posición de conocimiento.

💡 Economistas y Expertos en Eficiencia Energética

Se bromea diciendo que un economista te explicará mañana por qué lo que predijo ayer no sucedió hoy.

Algo similar ocurre con algunos «expertos» en eficiencia energética.

Las promesas de ahorros en CO2, energía y costes pueden desvanecerse tan rápidamente como aparecen, con excusas que van desde la severidad climática de ese año, cambios en el mercado energético, algún conflicto bélico al caso, voluntad divina o cualquiera otra peregrina razón causante de esta escasa rentabilidad, con la natural excepción de su producto o servicio.

💶 En iener, Medimos en Euros

Simple en su concepción, directo en sus resultados.

En 2014, al transformar las enfriadoras Trane en bombas de calor en el Hospital San Juan de Dios, logramos un ahorro neto anual mínimo de unos 100.000€ en esta primera fase, incluso después de cubrir todas las inversiones, gastos y nuestros honorarios.

Nuestro diseño incluyó un sistema híbrido que permite volver fácilmente al uso de gas natural, ofreciendo al hospital una comparativa directa de eficiencia.

Tan simple como permutar el tipo de combustible pasando del sistema eléctrico mediante las plantas enfriadoras mejoradas a COP 6,3 al anterior sistema de Gas Natural mediante calderas.

🌍Lo intangible, gratis

Las bombas de calor no solo son efectivas, sino que también son soluciones elegantes para problemas complejos. No requieren grandes infraestructuras ni consumen recursos excesivos y son capaces de adaptarse a las necesidades estacionales.

Las emisiones de CO2 pasaron de unas 1.000 Tm/año a 0 convirtiendo al San Juan de Dios Zaragoza en el primer hospital «0 emisiones» del que tengamos constancia y a años luz en sostenibilidad medioambiental respecto a instalaciones asimilables.

Los indicadores GRI, otro acrónimo como no podría ser de otra manera, resultan evidentes, clarificadores y constatan la eficacia en el tiempo generando unos ahorros económicos netamente superiores a 1.000.000€ desde su implantación. Y todo esto con el valor añadido de la evidente mejora medioambiental, social y de imagen pública para el Hospital

🏆 Un Caso de Éxito. Un hospital valiente

Tomar la decisión de ejecutar este proyecto al hospital, no solo le generó ahorros significativos, sino que también fue seleccionado como «Proyecto Ejemplarizante» por el Servicio de Planificación Energética del Gobierno de Aragón, demostrando el valor de tomar decisiones audaces y sostenibles.

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