Una parte de mi infancia transcurrió en Barcelona, desde los 4 hasta los 8 años, y los domingos eran días que esperaba con ansias. Madrugaba sin necesidad de despertador para acudir al mercado de San Antonio, donde el intercambio de cromos, tebeos, sellos y monedas, se volvía casi una ciencia del regateo. Después, ya acompañado por mis padres, nos dirigíamos a la Casa de Aragón, próxima a la Plaza de Cataluña. Recuerdo aquel perenne sonido de las jotas de fondo y el ritual del vermú que casi siempre acababa en lágrimas dado que, quien más o quien menos, todos añorábamos regresar un día a nuestra tierra. Pero lo que más me fascinaba de aquella obligada visita y aprovechando la proximidad, era escaparme a las Ramblas para observar a los trileros.
En retrospectiva, aquellos triles de la Barcelona de finales de los 60, representaban una lección sutil pero poderosa y permanente. Entre cartas y bolitas aprendí el valor de la veracidad.
Comprendí lo fácil que es perder cuando uno juega con trucos. Y de lo valiosa que es la transparencia en cada interacción.
Veracidad como Pilar de la Gestión
En iener, hemos hecho de la veracidad una piedra angular de nuestra filosofía. Sabemos que cuando se trata de cifras y proyectos, no hay espacio para trucos. Un técnico o una empresa que engaña a los demás termina engañándose a sí mismo. Por eso, cuando hablamos de Passivtermia en las viviendas Passivhaus de Grupo Lobe, prometemos bajo coste energético, durabilidad excepcional y mantenimiento mínimo. Y lo cumplimos.
Nuestro enfoque está centrado en el cliente. Nos aseguramos de evitar la instalación de elementos superfluos que pudieran generar sobrecostes en instalación o mantenimiento. La clave está en ofrecer lo que realmente aporta valor, no lo que encarece. ¿Tiene sentido recomendar unos caros contadores de energía térmica cuando el propio RD 736/2020 te exime de esa obligación al utilizar ventiloconvectores (fancoils) nuestra Passivtermia?
Este simple sobrecoste de unos 500 €/vivienda, unos 300.000 €/año para la producción de Grupo Lobe, lo consideramos como innecesario.
La Transparencia en Números: El Euro Como Unidad de Medida
En vez de ocultarnos tras términos técnicos como Kwh, COP o EER, en iener optamos por una métrica que todos entienden: el euro.
Del mismo modo que en el apartado anterior sobre la instalación de elementos superfluos o innecesarios, cada paso en nuestro diseño también está guiado por una pregunta clave: ¿cuánto ahorrará el cliente a lo largo de 30 años?.
No se trata solo del precio de entrada, sino de cómo ese ahorro se manifiesta a largo plazo en mantenimiento y energía. Queremos claridad, y apostamos por ella.Nuestra Aerólica, que hibrida el aporte de aire de ventilación con el aire ambiental apenas supone coste. El consumo energético de este sistema, incluso funcionando 24 horas al día, supone unos 0,022 € diarios. Es decir, unos 0,6 € mensuales.
La aerólica también permite la calefacción y refrigeración de la vivienda como tendremos ocasión de tratar en próximas publicaciones e igualmente a ridículos costes de adquisición y mantenimiento
Transparencia y Sostenibilidad
La sostenibilidad no es solo energía limpia o materiales reciclados. También tiene que ver con números claros y con alcanzar objetivos reales. Cada euro invertido hoy por nuestros clientes en una vivienda eficiente significa ahorros futuros y una vida más tranquila.
En el mercado de San Antonio, la reputación, la honestidad y el valor real lo eran todo. Quien fallaba en un trato, perdía su reputación. De igual manera, en iener, apostamos por una relación transparente y de valor tangible con nuestros clientes.
En las Ramblas, algunos jugaban a adivinar, pero solo aquellos que apostaban por la verdad ganaban a largo plazo. Así es como trabajamos en iener: con claridad, veracidad y el euro como nuestra unidad de medida.
Gracias por leernos
Hemos mencionado en publicaciones anteriores que nuestras instalaciones están diseñadas para durar más de 30 años, lo que coincide con la duración típica de una hipoteca.
Sin embargo, si somos honestos, no lo sabemos con certeza. Preferimos no limitarnos a lo convencional. Apostamos no solo por la durabilidad de nuestras soluciones, sino por su capacidad para superar expectativas.
KAIRÓS CONTRA CRONOS: TIEMPO DE CALIDAD vs TIEMPO DE DURACIÓN
Seguramente has oído hablar de la expresión “coger la oportunidad por los pelos”, relacionada con Kairós, el dios griego del momento oportuno.
Kairos es un joven con un mechón de cabello muy largo en la frente pero completamente calvo por detrás. Es el dios caprichoso de la oportunidad que pasa rápidamente, al que sólo se le puede coger por el mechón según viene. Representa esa ventana de oportunidad que, si se aprovecha, puede cambiar el destino de cualquier proyecto.
Para nosotros, Kairós simboliza la calidad en el momento preciso, una oportunidad que se presenta y que debemos aprovechar para optimizar nuestras soluciones.
¿POR QUÉ CONFIAMOS EN LA DURABILIDAD DE NUESTRAS INSTALACIONES?
La respuesta es sencilla: porque ya lo hemos vivido.
A lo largo de más de cuatro décadas, hemos acumulado una experiencia que nos permite hablar con seguridad sobre la durabilidad de los sistemas que proyectamos, instalamos y mantenemos.
Un claro ejemplo son los climatizadores Koolair, instalados hace más de 40 años en el Hemiciclo de las Cortes Aragonesas. No solo siguen funcionando, sino que lo hacen con un rendimiento óptimo.
Este es solo uno de los muchos ejemplos. Trabajamos con fabricantes de confianza como Keyter, Koolair, Otedisa , Siemens y otros cuyos productos han demostrado resistir el paso del tiempo y mantener su eficiencia mucho más allá de los estándares convencionales. Por ello, cuando decimos que nuestras instalaciones pueden durar más de 30 años, lo hacemos con la certeza de que nuestra experiencia y resultados lo respaldan.
DURABILIDAD Y SOSTENIBILIDAD: DOS CARAS DE LA MISMA MONEDA
La sostenibilidad no es solo cuestión de eficiencia energética. También implica la capacidad de una vivienda para mantener bajos los costes de mantenimiento y conservación a lo largo del tiempo.
Esto es clave en nuestro enfoque con Passivtermia, la solución de climatización que desarrollamos para las viviendas Passivhaus de Grupo Lobe.
Este sistema no solo está diseñado para minimizar el consumo energético, sino también para requerir muy poco mantenimiento. Seleccionamos componentes que han demostrado su fiabilidad y durabilidad, reduciendo así las intervenciones y los costes.
El resultado es un sistema que no solo ahorra energía, sino que también genera ahorro a lo largo de su vida útil.
NUESTRA FÓRMULA: EXPERIENCIA, CALIDAD Y CONFIANZA
No se trata solo de utilizar la tecnología más avanzada. Se trata de combinar la innovación con la experiencia adquirida a lo largo de más de 40 años en el sector. Las instalaciones en las que confiamos duran décadas, y con un mantenimiento adecuado, sabemos que seguirán funcionando de manera eficiente durante muchos años más.
Este es el valor añadido que ofrecemos a nuestros clientes: la tranquilidad de saber que su inversión en una vivienda Passivhaus no solo es una apuesta por la eficiencia energética, sino también por la durabilidad y la calidad a largo plazo.
CONCLUSIÓN: MÁS ALLÁ DE LOS 30 AÑOS
¿Cuánto durarán nuestras instalaciones? Más de 30 años, probablemente 40 o más. Lo único que podemos garantizar es que estaremos aquí para asegurarnos de que las instalaciones sigan funcionando de manera eficiente y que su ciclo de vida se extienda lo máximo posible.
No te pierdas nuestras próximas publicaciones. Seguiremos profundizando en cómo Passivtermia está revolucionando la sostenibilidad y la durabilidad en las viviendas Passivhaus.
Gracias por leernos
🏡 ¿Cuánto “gasta” realmente una vivienda Passivhaus de Grupo Lobe?
La pregunta puede sonar simple, incluso gramaticalmente incorrecta, pero en iener nos gusta ir más allá de lo evidente. Cuando hablamos de “gasto”, no solo nos referimos al consumo energético. Nuestra visión es mucho más amplia: sostenemos que el coste real de una instalación debe medirse en tres dimensiones fundamentales: adquisición, mantenimiento y ciclo de vida.
💰 El Coste de Adquisición: El Ahorro Está en los Detalles
Imaginemos que eliminamos los sistemas tradicionales de contabilización de energía térmica individual, que suelen costar alrededor de 500 € por vivienda. Esta medida por si sola, ya se traduce en un ahorro de unos 300.000 € al año para la producción media anual de Grupo Lobe. Gracias a esta optimización, a nuestra Passivtermia —junto con otros sistemas innovadores de su proceso productivo en Grupo Lobe—, se ha logrado un hito impresionante: ofrecer al mercado toda una Passivhaus de 90 m² con garaje, trastero y piscina comunitaria por solo 153.000 €.
Esto no es solo un ahorro; es un salto hacia la accesibilidad real a viviendas dignas, eficientes y asequibles, algo que muchas políticas sociales aún no han conseguido materializar.
🛠️ Coste de Mantenimiento: La Verdadera Eficiencia Está en lo Sencillo
Uno de los pilares de la Passivtermia es la reducción al mínimo de los costes de mantenimiento. Al contrario de lo que muchos creen, el uso de un sistema de contabilización de energía individualizado en una vivienda Passivhaus, con su ridículo consumo térmico, es simplemente ineficiente. No solo por el gasto inicial, sino porque el coste de leer, repartir y actualizar estos sistemas de contadores seguramente superaría al de todo el mantenimiento completo de nuestra Passivtermia.
¿El resultado? Un coste de mantenimiento mensual tan barato como un café. Eso es lo que llamamos eficiencia.
⏳ Ciclo de Vida: Diseñada para Superar Expectativas
Nuestra Passivtermia no solo es eficiente; está diseñada para durar. Con una vida útil superior a los 30 años —más que el período promedio de amortización de una hipoteca—, cada componente ha sido seleccionado por su durabilidad comprobada. Trabajamos con marcas reconocidas como Keyter, Koolair, Otedisa, Isover, Belimo, Sistena, Siemens u otras. Después de nuestros más de 40 años proyectando, instalando y manteniendo equipos de estas marcas, vemos su operatividad y rendimiento continuo como un testimonio innegable de calidad y fiabilidad.
🔍 ¿Por Qué No Ponemos Contadores?
A la hora del diseño de la Passivtermia y sus ridículos consumos de energía, se suscitó la instalación de contadores de energía térmica para la climatización.
Tras muy sesudas reflexiones, llegamos a esta conclusión ¿Para qué?
Sostenemos que estos contadores no son necesarios. Las viviendas Passivhaus de Grupo Lobe están diseñadas para un consumo energético tan bajo que los sistemas de contadores tradicionales resultan redundantes. El ahorro no está solo en el uso de la energía, sino en la eliminación de costes innecesarios que otros pasan por alto. Cada euro cuenta, y en iener, nos aseguramos de que cada euro sea una inversión en calidad, sostenibilidad y valor a largo plazo.
📈 ¿Listo para Revaluar el “Gasto” de tu Vivienda?
Es hora de pensar diferente. No se trata solo de cuánto pagas hoy, que importa y mucho. Sino de cuánto estarás ahorrando en el futuro. En las próximas publicaciones, desglosaremos cada detalle del mantenimiento de nuestra Passivtermia para que descubras cómo puedes maximizar tu inversión y minimizar tus costes.
Síguenos y apúntate a nuestra lista de correo semanal para conocer más sobre cómo revolucionamos la eficiencia en viviendas.
Gracias por leernos
La teoría de las ventanas rotas, desarrollada por los criminólogos James Q. Wilson y George Kelling, sostiene que cuando se toleran pequeños signos de deterioro en un entorno —como una ventana rota que no se repara— se envía un mensaje de desinterés y abandono que puede desencadenar un deterioro más acelerado. Aunque esta teoría se aplicó originalmente al ámbito de la seguridad pública, sus principios tienen una resonancia perfecta en la gestión y conservación de nuestras viviendas y edificios.
🔧 La Realidad del Mantenimiento Residencial
No es raro encontrar edificios relativamente nuevos que, al poco tiempo de su construcción, ya muestran signos evidentes de abandono: equipos de aire acondicionado mal colocados (como en la imagen superior), cerramientos ilegales y caóticos, humos, olores, ruidos, manchas de pintura, humedad, grietas… Pequeños signos de descuido que, si no se corrigen a tiempo, pueden precipitar un deterioro generalizado. Es el momento de elevar los estándares de mantenimiento y conservación en nuestros entornos construidos. Porque la calidad de vida y la convivencia entre vecinos no se miden solo en metros cuadrados, sino también en la dignidad del entorno y en la preservación del valor a largo plazo.
💡 Passivtermia: Gestión Inteligente para la Conservación Patrimonial
Esta semana hemos iniciado la puesta en marcha de las viviendas Passivhaus de Grupo Lobe en la promoción de Esparta, Arcosur (Zaragoza). En iener, sabemos que una gestión eficaz del mantenimiento es crucial para preservar el valor de cualquier edificación. Por eso, uno de los cinco pilares que estamos desarrollando en la primera etapa de la Passivtermia es un sistema de gestión y conservación patrimonial del edificio.
Inicialmente centrado en las instalaciones de climatización, este sistema también es adaptable a la iluminación, redes de incendios, seguridad, ascensores, piscinas, o cualquier otra instalación comunitaria. Desde una interfaz central, se puede acceder al control y manejo de todos estos parámetros. No se trata solo de minimizar el mantenimiento —que ya de por sí reduce costes significativamente— sino de maximizar la durabilidad de los equipos y componentes, superando incluso el plazo de amortización de una hipoteca estándar. Así, garantizamos que la inversión esté protegida desde el primer día y durante toda la vida útil del inmueble.
En la imagen inferior, pantalla principal del sistema de gestión centralizada
📅 Climatización Centralizada: La Desaparición del Aire Acondicionado en las Fachadas
Nuestro sistema de gestión, en este caso concreto de la climatización, elimina los problemas tradicionales en viviendas plurifamiliares. Con un manejo tan sencillo como un clic de ratón, un equipo centralizado, especialmente diseñado para la Passivtermia y fabricado por Keyter, se encarga de distribuir la energía térmica desde la cubierta a cada vivienda. El mantenimiento consiste básicamente en NO hacer nada. Con una vida útil superior a la de una hipoteca, apenas necesita otra intervención que no sea una supervisión periódica y el volcado de los parámetros de funcionamiento. Esta supervisión es continua y, en caso de incidencia, el sistema de gestión envía automáticamente un aviso al administrador, presidente de la comunidad o empresa de mantenimiento.
En la imagen inferior, pantalla principal de la bomba de calor
💰 Reparto de Costes: Transparencia y Ahorro Garantizado
El coste del mantenimiento mensual del sistema de climatización para cada vecino no debería superar el precio de un café: unos 2 €/mes. Desde que comenzamos a monitorizar esta instalación piloto a finales de junio, los consumos y ahorros energéticos de estas viviendas Passivhaus han resultado ser sorprendentemente bajos. Además, el sistema permite una supervisión vivienda por vivienda, y un algoritmo se encarga de generar un informe mensual con el reparto de costes de energía.
En la imagen inferior, pantalla monitora de temperatura, calidad del aire, consumos y otros parámetros de las viviendas
En próximos artículos, profundizaremos en este sistema de reparto de costes, tanto para climatización como para ventilación y otros servicios.
Te invitamos a suscribirte a nuestra newsletter semanal para no perderte ninguna novedad.
🏗️ Del Pre-Hiring al Mundo Profesional Actual: Reflexiones desde una Infancia en el Inframundo
Hace unas semanas, varios clientes nos apremiaron a ampliar nuestra oferta de servicios. La demanda era clara: precisaban ingenieros para la legalización administrativa de nuestros proyectos. Ya lo habíamos intentado el verano pasado, pero sin éxito. Al parecer, el sol y la playa resultaron más atractivos que nuestras propuestas laborales.
Sin embargo, pertinaces e inasequibles al desaliento, decidimos intentarlo de nuevo.
Y así, de forma inesperada apareció esa etiqueta de “Hiring” en nuestro perfil de LinkedIn. Confieso que tuve que buscar en el diccionario su significado… Y eso me llevó a reflexionar sobre cómo han cambiado las cosas desde aquellos primeros pasos en esto del “Hiring” para aquellos que crecimos pasando largos veranos en un pequeño pueblo español a finales de los 60 y principios de los 70.
🌱 El Pre-Hiring: Una Infancia en el Inframundo
En aquellos tiempos, casi todo lo que se hacía hoy sería ilegal. Nosotros hubiéramos acabado atendidos por servicios sociales y los adultos, en un oscuro calabozo acusados de explotación y maltrato infantil. Pero para nosotros, trabajar era algo tremendamente ansiado. Esta etapa del pre-hiring, que abarcaría entre los 3 o 4 años y hasta unos 7 u 8, consistía en habitar una especie de inframundo donde todos queríamos crecer rápido, tener dinero propio y dejar atrás la vergüenza de mendigar la propina semanal.
Pasar de nivel significaba ganar lo suficiente para una bicicleta de cuarta o quinta mano, un paquete de Celtas cortos completo en lugar de cigarrillos sueltos o sentirte un potentado coleccionando cromos y tebeos sin depender de aquellas pesetillas que, cual si fuesen droga, nos pasaban furtivamente y a escondidas nuestras abuelas desde su delantal. O lo más anhelado: jugar a las cartas apostando nuestro dinerillo y sin recurrir a chapas, piedras u otros vergonzantes e infantiles sustitutos.
🤝 El Hiring Sharing: Una Miseria Repartida
Desde los 7-8 y hasta unos 10-12 años, compartimos trabajos retribuidos en los viveros, recogiendo fruta o en otras tareas del campo. Era también una etapa difícil, pero el deseo de crecer y ascender de nivel estaba presente. Mantener el ritmo de un peón entre tres o cuatro chavales era la norma, y «ascender» significaba el poder hacer el mismo trabajo entre menos y tocando por tanto a mayor paga en el reparto
Avanzar de nivel era la posibilidad de adquirir un vetusto Vespino, conducir el coche o tractor sin la tutela de un adulto y, lo más ansiado, disponer de una peña con los amigos donde iniciarnos en el alcohol, fumar sin escondernos e invitar a bailar a las chicas (y no necesariamente en ese orden).
⚒️ El Black Hiring: Una Pobreza Individual
Desde los 10-12 años, ya manteníamos el ritmo de trabajo de un adulto liberándonos de compartir la paga. Trabajos duros como la vendimia nos enseñaron el valor de cada peseta.
Crecer rápido y subir de nivel ya significaba poder fumar en casa, tomar vino en las comidas, jugar a las cartas o beber alcohol en el bar; llegar más tarde a casa y, sobre todo, vestir pantalón largo o poder dejar la escuela.
💼 El Hiring a Secas: Desde la Mayor de las Miserias, a las Más Elevadas Cotas de Pobreza
A los 14 años, la edad de la liberación, ya se podía trabajar legalmente como aprendiz de primer año. De ahí en adelante, la aventura laboral continuaba en su versión más adulta. Aquellos precarios y primeros subempleos de finales de los 70 a razón de unas 3.200 pesetas a la semana (unos 20€ a día de hoy) como aprendiz de mecánico, camarero u otros muchos oficios con la habitual “media jornada” de 12 horas diarias y 6 días por semana…nos confirma lo mucho que hemos avanzado socialmente en calidad de vida, derechos y libertades durante estos últimos 45 años.
O quizás…demasiado
🔍 Reflexionando sobre esto del actual Hiring
Hoy, con este anglicismo del “Hiring”, parece algo atractivo y cotidiano en nuestras vidas profesionales, pero me recuerda aquellos primeros intentos de formar parte de algo más grande.
Contratar a nuevos miembros no es solo un trámite administrativo; es un paso hacia la construcción de una comunidad de personas y profesionales comprometidos con un proyecto común.
En estos tiempos, encontrar el talento y sobre todo, el entusiasmo adecuado, puede ser tan complicado como en aquellos primeros aprendizajes. Recordamos el valor de la persistencia, la disciplina, la tolerancia a la frustración, el sufrimiento, y sí, también la nostalgia de cuando trabajar era más un anhelo que una obligación.
Hoy en día, muchos forman parte de esa sangría que representan los aproximadamente 500.000 jóvenes que cada año abandonan nuestro país. Otros se quedan tratando de pertenecer a ese 50% que, en virtud de «la paguita», subsisten a costa de ese otro 50%, y ya unos pocos, luchan por labrarse aquí un futuro más dignificante que el depender de una propinilla, como en tiempos pasados del pre-hiring en el inframundo..
En iener, buscamos ingenieros que, como nosotros en aquellos años, vea en este trabajo no solo un empleo, sino una oportunidad de crecimiento personal, aprendizaje y pertenencia.
Gracias por leernos